sábado, diciembre 05, 2009

Revolución en la revolución 3: Contra todo totalitarismo

Gustavo Buntinx comenta nuevamente en su blog en torno al caso de Yoani Sánchez (quien fue agredida en Cuba por mantener un blog crítico del régimen castrista) y los reparos que existen al defender la libre opinión frente al control totalitario del discurso. Me pregunto: qué otra revolución podemos defender sino aquella del lado del ejercicio libre de la palabra, de la desclasificación permanente de los cuerpos. Es acaso imposible imaginar --y más aún desde un discurso de izquierdas-- un proyecto político y crítico más poderoso que cualquier ideologización burocrática, impuesta y controlada, para imaginar una revuelta radicalmente otra inscrita en el desacuerdo mismo, en esa demarcación radical del artificio consensual y profundamente despolitizador que intenta continuamente asignar lugares perfectamente demarcados dentro el orden así llamado revolucionario, filtrando la entrada y la salida de ciertos cuerpos, disponiendo los límites de aquello que puede ser dicho o pensado. Hay situaciones donde la 'policía' se quiere enmascarar como auténtica política.

(en el otro extremo: ahora mismo en Colombia se despliega una acusación judicial sobre un joven estudiante de arte que armó un grupo en facebook donde se 'amenazaba' a la familia del presidente. más allá de la imprudencia que pueda reprochársele sorprende la espectacular celeridad y la sobrecarga mediática que bien parecen orquestadas como una buena inyección de miedo colectivo. esta vez sí se trata de la policía --sin máscaras posibles-- en todo su espledor)
........

Revolución en la revolución 3: Contra todo totalitarismo
por Gustavo Buntinx



Vuelvo sobre los temas urgentes de las luchas por la emancipación y la ciudadanía total. Tareas políticas de primer orden que bajo el régimen cubano se ven ahora encarnadas por voces independientes y reprimidas como las de Yoani Sánchez. Miguel López, en su blog Arte Nuevo, se pronuncia también al respecto en un gesto significativo por multiplicar el potencial liberador de internet. Pero han habido otras comunicaciones, privadas, expresando ansiedades ante la ruptura con una quimera que algunos identifican con juventudes e ilusiones perdidas. Sueños que devienen pesadillas a las que sin embargo la tortuosa psique humana se sigue aferrando. No faltan quienes racionalizan sus inseguridades mediante esotéricas interpretaciones de líneas políticas supuestamente embozadas en las comunicaciones de Yoani y otros disidentes.

El tema, por supuesto, es enteramente otro: la simple y llana libertad para la libre circulación e intercurso de ideas (y de personas), cualesquieras ellas sean. Para no agotarme en argumentar lo obvio, cuelgo arriba el video clandestino en que Yoani registra su confrontación con agentes del servicio de migraciones de Cuba al ser notificada de una nueva prohibición para su salida del país, sin explicación ni justificación alguna.

Insisto: ¿cuántos de los que entre nosotros titubean ante la dictadura cubana tolerarían ese ejercicio arbitrario del poder sobre sus propios cuerpos, sobre sus mentes?

Tarea revolucionaria crucial es liberar la palabra “revolución” de cualquier connotación opresiva y totalitaria. He allí una gesta romántica. Y de izquierdas.

No hay comentarios.: