Copio de momento la editorial del presente número y el texto de anuncio sobre su futura desaparición.
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EDITORIAL
Legados que queman
Se vino el invierno y necesito calentar el ambiente. Recién llegada de México aterricé en el campo cultural argentino dispuesta a encender la polémica, pero ojo, sin humo. El doble desafío de ramona 82 es historizar los fundamentales sesenta, y a la vez, situar la mirada que hace no mucho se posó sobre ella.
Para ello, Ana Longoni editó un candente y a la vez riguroso intercambio polémico entre cuatro investigadores (el español Jaime Vindel, el peruano Miguel López, el argentino Fernando Davis y ella misma) que vienen trabajando sobre las vanguardias sesentistas. El detonante fue un escrito de Vindel cuestionando una serie de lugares comunes en la historiografía argentina sobre los sesenta, y a partir de allí surgieron respuestas, reelaboraciones, réplicas y contrarréplicas. Además de la rigurosidad de los planteos, lo deslumbrante es la sinceridad con la que estos autores reponen las condiciones de producción de su propia reflexión, cómo sacan a luz el proceso por el cual arriban a sus conclusiones, cómo se animan a reformular sus propuestas, complejizándolas, enriqueciéndolas.
Para los glotones: algunas líneas de esta polémica serán retomadas muy pronto en otro número en preparación, tan o más fogoso. Será un "quién fue quién" en la escena argentina de las décadas del ochenta y del noventa. Mucha data posta.
Pero la térmica sigue subiendo. Luego del dossier, vienen reflexiones sobre dos novedades bibliográficas que recogen imprescindibles fuentes documentales sobre el arte local: por un lado, los artículos, conferencias y textos inéditos de Luis Felipe Noé compilados en Noescritos sobre eso que se llama arte (1966-2006); por otro, los registros y testimonios acerca de la intervención urbana conocida como El Siluetazo, compilados en una reciente publicación impulsadas ardorosamente desde ramona que decidió junto a Adriana Hidalgo editora convertir en un libro aquellos materiales que inicialmente iban a formar parte de un dossier especial de la revista.
Por último, una entrevista a las impulsoras de Estudio 13 relata cómo se desarrolla esta experiencia de autogestión con artistas de Río Negro y de Neuquén. ramona abre así una sección que dará cuenta de la escena artística contemporánea en distintos puntos del país.
Y ahora, así nomás, sin anestesia, me anticipo a notificar mi defunción. Será dentro de dos años. No es un lockout de la hoja. No se agotó mi "deseo de revista". No hubo cisma. Sólo quiero que me lean, me escriban, me extrañen, me deseen y se aprovechen de mí. Y para eso nada mejor que no estar. O que se piense que puedo no estar.
Terminaré en mi número 101 o quizás en el 102, para no ser exacta. Durante dos años más, junto a mis amigas, las sigo esperando a tomar unos vinos y a charlar como siempre, antes que me aqueje el bronce.
..........ramona deja de aparecer
a partir de julio 2010, para dejar paso
a proyectos aún más quijotescos,
Fiel al principio de contradicción, nací con el milenio y cesaré en el centenario. Lo anuncio desde ya para que se habitúen a un universo sin mí. Un mundo que quienes llegaron al arte durante la última década –es decir: la mayoría— nunca conocieron. A través de 101 ediciones ininterrumpidas, en medio de gravísimas crisis económicas, políticas e ideológicas, mis páginas habrán expresado la selvática floración del arte contemporáneo en Argentina. Fue una irrupción de centenares de artistas contra el monopolio del discurso y el poder institucional de legitimación, un mestizaje de lo más audaz y calificado de los artistas, ensayistas, escritores e historiadores, una invitación permanente a todos los actores, altos y bajos, centrales y periféricos, ricos y avaros, interesados y generosos, interesantes y aburridos, estudiosos y coleccionistas, ignorantes e ignorados. Las debilidades de la revista fueron muchas pero no muy distintas a las que se podrían imputar al ambiente de donde provinieron sus innumerables colaboradores.
Pero faltan todavía 2 años y 20 números. Hay muchísimo que hacer y muchísimo que decir. Mientras los críticos cacarean, seguiré rompiendo los huevos. Los instigo a batir y degustar la suculenta tortilla que se cocinará en los años que vienen. No se la pierdan.
[fotos tomadas de la web de ramona: Oscar Bony, Relación cerrada, 60m2, 1967; y Juan Pablo Renzi, Coordenadas espaciales de un prisma de aire, 1967]
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