viernes, junio 17, 2011

Carta abierta al Ministro de Cultura - Víctor Vich

Quizá en un país como el Perú nada hubiera podido impedir que Alan García instalara ese Cristo en el morro solar. La falta de instituciones (y de unos medios de comunicación que nunca ayudan a redefinir la política) da pie a que ella siga entendiéndose como la necesidad de hacer “grandes obras” y nunca como la urgencia por construir aparatos institucionales sólidos y descentralizados que impidan el paso de la autoridad al autoritarismo. La falta de instituciones en el país promueve que un Presidente, cual Rey, pueda hacer lo que quiera, como quiera y donde quiera.

Pero en esta historia del Cristo en el Morro Solar, sí hay un responsable adicional y es necesario decirlo aunque ello me cueste el saludo y la amistad universitaria. Me refiero al Ministro de Cultura Juan Ossio. Me explico mejor: si ha existido alguna autoridad que pudo haber contribuido a frenar tal barbaridad, esa debió haber sido el Ministro de Cultura, quien debió mostrar su disenso y no defender lo indefendible. ¿Por qué no lo hizo? La respuesta no es difícil: porque en el Perú hasta los sectores más ilustrados siguen entendiendo la política como una “prebenda” y como un conjunto de favores que hay que agradecer; porque en el Perú la política sigue siendo una suma de complicidades con el “amo tutelar” a quien nunca hay que cuestionar y al que hay que apañar en todos su engreimientos.

El Ministro Ossio debió discrepar de tal atentado contra la ciudad y liderar la oposición contra ese monumento vergonzoso que es una ofensa múltiple a nuestra propia tradición religiosa, al espacio público, a todos los artistas del país y a las propias políticas culturales que en este momento muchos colectivos, intelectuales y activistas están intentado ejecutar en el Perú. El Ministro Ossio debió renunciar a su cargo y hacer entrar en razón al presidente, o enfrentarse a él. Quizá, si él renunciaba, hubiera existido una pequeña crisis de gabinete y algo se hubiera podido negociar. El propio Ministro hubiera podido liderar la oposición con todo el sector cultural y ello hubiera contribuido a su mayor cohesión. No conozco a nadie del sector cultural que se encuentre a favor de ese monumento atroz e indefendible. No hay que ser ningún radical para afirmar que se trata de una obra absolutamente demencial.

Pero lo que más llama la atención de toda esta historia es que el Ministro Juan Ossio sea un antropólogo de profesión, es decir, una persona que apuesta por las particularidades locales y que las defiende y las fomenta. La antropología, hasta donde yo sé, hace todo lo contrario a promover la imitación burda de otras culturas y ha sido justamente esa disciplina la que ha descubierto que ese tipo de prácticas son siempre un gesto autoritario de poder.

Da mucha pena que el Ministerio de Cultura termine así su primer periodo de funcionamiento. Hoy sabemos que la aprobación de tal monumento sólo duró un día en Ministerio de Cultura. Es muy triste haber descubierto eso. O quizá haya que decirlo mucho más académicamente: en lugar de convertir a la cultura en un agente que contribuya a la construcción de una mayor ciudadanía garantizando, sobre todo, el derecho de las minorías, lo que hoy tenemos son las muertes de Bagua, Islay, la crisis actual con la comunidad Aymara y los decretos que fomentan la impunidad en la gestión pública; en lugar de utilizar la cultura para introducir nuevas representaciones que cuestionen a los poderes existentes, lo que tenemos es un ministerio que se somete al poder y que avala la imposición de una copia. Mucho más aún: en lugar de fomentar a la cultura como la instancia más crítica de una sociedad (al estilo de la crónica de Guamán Poma), lo que hoy se nos entrega es su conversión en una institución servil a un presidente loco. Tristísimo. O patético, por decir lo menos.


Víctor Vich

domingo, junio 05, 2011

NUNCA PERO NUNCA MÁS

Reproduzco mi columna del día miércoles 1 de junio publicada en Perú21.
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"NUNCA PERO NUNCA MÁS"


Aquella frase era impresa en los pasos de cebra de las pistas que se encontraban a lo largo de la multitudinaria movilización (26-M) en contra del regreso de Fujimori. Un grupo de artistas iba marcando el camino con esténcil y spray, grabando en la memoria de la ciudad la negativa pública a olvidar, el rechazo tajante a concebir el retorno de la corrupción y del crimen al aparato de Estado.

“Nunca más” resumía el grito unánime que sacudió Lima en un despliegue de creatividad que puso en claro que ante el autoritarismo se responde con imaginación, y que frente a las políticas del terror son necesarias las estrategias de la alegría. Disfraces, banderolas y música tomaron las calles para afirmar el acto político como un gesto de vital desobediencia.

Entre varias acciones, una resultó muy impactante: un colectivo de seis mujeres con las faldas levantadas y las piernas manchadas de rojo se desplazaron durante todo el trayecto empuñando gritos: “Somos ciudadanas y tenemos derechos”, “Mi cuerpo no es un campo de batalla”, “No sin mi permiso”. Una rabiosa alusión a las esterilizaciones forzadas practicadas a miles de mujeres durante la dictadura encabezada por Alberto Fujimori.

Hay una fuerza estética liberada por esos miles de cuerpos allí reunidos: una energía que detonó la alegría colectiva, pero también dio la mejor expresión a ese “Nunca más” hoy masivamente compartido. Ese 26-M modificó los límites desde donde imaginar el futuro.

Miguel A. López


[créditos fotográficos: foto 1, artistas antikeiko / foto 2, frank garcía photon]

miércoles, junio 01, 2011

“¡Ahora/que digan/que somos minoría!” - Nelson Manrique


Lo más destacable de esta semana es la reacción ética juvenil despertada ante la posibilidad del retorno del fujimorismo al poder. Las movilizaciones del jueves 26 en Lima y varias ciudades marcan un punto de inflexión en una campaña en la que, viendo la gran mayoría de los medios de prensa, radio y TV, aparentemente la reserva moral del país se había agotado. Existe una sensación muy poderosa en el descubrimiento de la propia fuerza cuando decenas de miles de personas marchan juntas en defensa de una causa, la decencia, que trasciende el color, la edad, el género, la condición social. La marcha “Fujimori nunca más” estuvo marcada por ese sentimiento de que no hay empresa imposible. Por la alegría de reencontrarse con la gente querida que respondió a la convocatoria. Por el entusiasmo de hermanarse en el mismo horizonte ético con aquellos a quienes uno conocía de otros contextos. Por la sorpresa y la felicidad de descubrir entre la muchedumbre a quienes no hubiéramos imaginado capaces de semejante empeño y resolución.

Varias cuadras de las principales avenidas del centro fueron cubiertas por los manifestantes (los capos en redes sociales pueden buscar con el hashtag #26M; incluyo un par de enlaces para los comunes mortales: http://bit.ly/kCYzqk y http://bit.ly/jYxzXN; puse también mi granito de arena: “Tambores en el Campo de Marte”, http://bit.ly/lsQqiL) . Pero en Canal N dijeron que eran 300; algo inmediatamente comunicado a través de las redes sociales y a lo que respondió la desafiante consigna: “¡Ahora/que digan/que somos minoría!”. A ese nivel ético ha llegado en la era post Martha Meier Miró Quesada ese medio cuya lucha contra la dictadura fujimorista en el 2000 fue emblemática. En el libro de récord Guinness debiera figurar el rechazo de los Miró Quesada a la propuesta de MVLl, de –para ofrecer una cierta equidad– realizar un programa gratis, bajo su dirección, en Canal 4, llevando como productor a Luis Llosa y a Gustavo Gorriti como redactor principal. Un team dream con un Premio Nobel, un reconocido cineasta y un periodista con varios premios internacionales rechazado por los dueños (porque tienen plata pues) de la verdad, mientras se llenan la boca con frases sobre la “defensa de la libertad de expresión”. La buena noticia es que las redes sociales rompen la censura informativa y la lucha por abolir la verdad ha rendido sus frutos: han erosionado tanto su credibilidad que hoy sus campañas de descrédito son inútiles.

Más allá de la masividad de la movilización juvenil en defensa de la verdad y la decencia llama la atención su enorme calidad. En la marcha la pasión, la juventud, la belleza y la creatividad artística estuvieron enlazadas. A lo largo de un trayecto que se extendió desde la plaza Dos de Mayo a la Av. Abancay y al Campo de Marte hubo un extraordinario despliegue de imaginación, con alegorías recordando la estrecha asociación entre Keiko, Alberto Fujimori y Vladimiro Montesinos, los crímenes del grupo Colina, el saqueo del Estado por la mafia delincuencial que se apropió del país en los años 90, la esterilización forzada de 300 mil mujeres campesinas, las víctimas perfectas, porque no tenían cómo defenderse (en un debate en Facebook un fujimorista argumentó que la esterilización de mujeres pobres había sido impuesta por los organismos multilaterales como condición para otorgar créditos; y el buen señor creía que estaba defendiendo su causa).

Cuando finalmente pudo echársele del poder, el fujimorismo, aparte de los US$ 7000 millones robados (o precisamente por eso), dejó sumido al país en una profunda crisis económica: 54% de pobreza, 200 mil peruanos despedidos, 23 mil empresas quebradas (95% de ellas pymes), otras 120 mil endeudadas, y una caída del empleo industrial del 33% (Fuente: SNI, SBS). De las 300 mil personas que laboraban en este sector, solo el 15% se quedó con trabajo (Fuente: CAPECO, Maximixe e Inform@cción). El sector comercial cayó de 11,1% de crecimiento, a -3,1% en 1998 (Rubén Cano, “¿Quién dijo que el fujimorismo arregló la economía?”, Bajo la lupa, http://bit.ly/kvzY17). De los peruanos depende no volver a esa ignominia.

www.nelsonmanrique.com


[Publicado en La República, el día de ayer 31 de mayo de 2011]

Cartas de grupos de intelectuales y académicos contra el regreso del fujimorismo

Pasan las horas y se incrementan las adhesiones que cierran filas frente al pretendido retorno del fujimorismo. Republico ahora distintas cartas enviadas por diversos gremios de intelectuales, historiadores, escritores y diversas personas vinculadas con la vida política y académica del país que han salido a decir de forma tajante y rotunda NO al retorno del aparato criminal y corrupto que gobernó de forma autoritaria durante los años 90, y cuyo mismo equipo intenta enquistarse hoy en el poder bajo la falsa representatividad de la hija del dictador, Keiko Fujimori Fujimori. Nada mejor expresado que a través de las palabras del sociólogo Julio Cotler , varias veces repetidas en estas horas: "El Fujimorismo representa lo más repulsivo y repugnante que puede tener la sociedad peruana".

Entre las múltiples firmas de estos comunicados destacan la del reciente nobel de literatura Mario Vargas Llosa, el escritor Alfredo Bryce Echenique, el sociólogo Nelson Manrique, el politólogo Julio Cotler, el ex congresista Henry Pease, el sociólogo Rolando Ames, el crítico literario Gustavo Faverón, el escritor Fernando Iwasaki, el director del diario El Comercio Francisco Miró Quesada Rada, el politólogo y profesor de la Universidad de Harvard Steven Levitsky, entre varios otros.

Reproduzco los documentos que son de interés cultural y político (el primero de estos es del gremio de escritores).
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CONTRA EL REGRESO DEL FUJIMORISMO Y A FAVOR DE LA DEMOCRACIA

Quienes suscribimos esta carta expresamos nuestro enérgico rechazo ante la amenaza que, contra la democracia y la libertad de los peruanos, supone la posible resurrección de la dictadura fujimorista.

El régimen de Alberto Fujimori marcó el periodo más siniestro en la historia de nuestros gobiernos republicanos. Fue una década criminal cuyas funestas consecuencias no debemos olvidar, relativizar ni pasar por alto. En los últimos años, el mayor triunfo de la democracia peruana ha sido el rechazo a esa dictadura, el procesamiento judicial de sus líderes y el castigo legal a los innumerables delitos y crímenes contra la humanidad que cometió. El Perú debe rechazar una vez más la impunidad y reforzar su fe en una democracia con justicia para todos y con posibilidades de progreso dentro de un orden legítimo.

Los escritores que firmamos esta carta venimos de lugares muy distintos del espectro político peruano y tenemos ideas divergentes sobre cómo debería ser el manejo económico y social del Perú. Creemos, sin embargo, en el valor de la libertad, el rechazo a la criminalidad y a la violencia de estado, la defensa del orden legal y el respeto a los derechos humanos. Pensamos que estos son cimientos cruciales para la construcción de una nación justa y solidaria.

El candidato presidencial Ollanta Humala ha jurado públicamente defender esos principios. Creemos que nuestro deber en este momento es escuchar ese juramento y que nuestra obligación inmediatamente posterior será vigilar su cumplimiento. El presente nos ha dejado con esa alternativa que es la vía válida de oposición a la reinstauración de la dictadura.

La democracia es el ejercicio de una negociación: todo gobierno debe escuchar a su sociedad civil. La sociedad civil tiene el deber de guiar a su gobierno, hacer sentir su poder y su mandato y fiscalizar su rectitud. Pero esa negociación sólo es posible cuando el poder lo ocupa un movimiento político. El crimen está fuera de ese espectro: no se negocia con quienes han abandonado la política y han elegido la criminalidad.

Por estas razones, los abajo firmantes llamamos a la sociedad a mantener su poder de representación, rechazando el regreso de la dictadura y solidificando, mediante el voto por Ollanta Humala, con una actitud activa y vigilante, nuestro orden democrático. El nuestro es un llamado esperanzado y optimista a la unidad nacional: este 5 de junio, los peruanos debemos defender, a través de un voto responsable y cívico, nuestra dignidad, nuestra libertad y nuestra democracia.

Atentamente,

  • Alfredo Bryce Echenique DNI: 10840740
  • Mario Vargas Llosa DNI: 06625243
  • Miguel Gutiérrez Correa DNI: 06117054
  • Abelardo Oquendo Cueto DNI 07774567
  • Rodolfo Hinostroza DNI: 06644071
  • Fernando Iwasaki DNI: 06517306
  • Daniel Alarcón DNI: 46678140
  • Santiago Roncagliolo DNI: 10264193
  • Diego Trelles Paz DNI: 10770076
  • Gabriela Wiener Bravo DNI: 10141561
  • Roger Santiváñez DNI: 08104162
  • Carlos López Degregori DNI 07770757
  • Ricardo Sumalavia DNI: 25564248
  • Gustavo Faverón Patriau DNI: 09297955
  • Juan Carlos Ubilluz DNI: 25728798
  • Miguel Ildefonso DNI: 07466249
  • Emilio Bustamante DNI: 10811698
  • Juan Manuel Robles DNI: 40037861
  • Luis Hernán Castañeda DNI: 41308217
  • Jorge Eduardo Benavides Pasaporte: 0426237
  • Carlos Yushimito del Valle DNI: 07525367
  • Alfredo Pita DNI O6519037
  • Rosina Valcárcel DNI: 07330070
  • Martín Guerra Muente DNI: 07535897
  • Olga Rodríguez Ulloa DNI: 41898752
  • Andrea Cabel García DNI: 41624669
  • Maurizio Medo DNI: 06026716
  • José Carlos Yrigoyen DNI: 10273153
  • Eduardo González Viaña DNI: 18172685
  • Victoria Guerrero DNI: 09645644
  • Jaime Rodríguez DNI: 104349
  • Jorge Eslava DNI: 25680876
  • Max Palacios DNI: 07877452
  • Alexis Iparraguirre DNI: 08157171
  • Ezio Neyra MagagnaDNI: 40762566
  • Rodolfo Ybarra DNI: 09441432
  • Juan Cristobal DNI: 08705429
  • Félix Terrones DNI: 40730345
  • Carlos Dávalos DNI: 10278109
  • Otilia Navarrete DNI 08809979
  • Walter Lingán DNI: 23522780
  • José Antonio Galloso DNI: 09868715
  • Luis Freire Sarria DNI: 06628179
  • Gustavo Rodríguez DNI: 07864321
  • Percy Encinas C. DNI: 08266219
  • Grecia Caceres DNI: 09817275
  • Cecilia Podestá DNI: 41028393
  • José Güich RodríguezDNI: 07272400
  • Harold Alva Viale DNI: 80654533
  • Giancarlo Stagnaro DNI: 10003659.
  • Richard Parra DNI: 07507025
  • Ernesto Escobar Ulloa DNI: 09867828
  • Claudia Arteaga DNI: 42500425
  • Bernardo Rafael Álvarez DNI 25486055
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Politólogos contra Keiko Fujimori

lunes 30 de mayo de 2011

A la opinión pública

El Perú se prepara para una elección el próximo 5 de junio donde ninguno de los dos candidatos presidenciales exhibe las credenciales democráticas que desearíamos. Sin embargo, ante el dilema existente es ineludible optar, y los politólogos abajo firmantes creemos que la llegada de Keiko Fujimori al poder sería el peor resultado para el país.

Como politólogos valoramos especialmente el régimen democrático, pues permite el pluralismo y el debate abierto, protege las libertades fundamentales y los derechos humanos, restringe las oportunidades para la corrupción y favorece el logro de acuerdos que generan desarrollo y políticas públicas a favor de la población más vulnerable. Debido a estas consideraciones de principio vemos con suma preocupación la elección de la señora Fujimori como Presidenta de la República, pues constituiría la reivindicación del gobierno de su padre que, precisamente, liquidó la democracia en el Perú e impuso un régimen autoritario que cometió crímenes de lesa humanidad como política organizada desde la cúspide del poder, y que hizo de la exclusión, el clientelismo, el abuso y la corrupción sus mecanismos principales de gobierno.

El fujimorismo actual, lamentablemente, no ha deslindado con las prácticas que deploramos del gobierno de Alberto Fujimori. En las últimas semanas hemos visto que sus voceros han elogiado, justificado o minimizado esas prácticas, lo que nos hace imposible creer que la señora Fujimori represente una opción diferente y democrática. Por tanto, y porque creemos que la defensa de los valores democráticos es parte fundamental de nuestro compromiso con el Perú, nos pronunciamos en contra de la candidatura de Keiko Fujimori.

Finalmente, independientemente de quién gane las elecciones presidenciales, consideramos que habrá que mantenerse alerta ante cualquier intento de pasar por encima del Estado de derecho y de las instituciones democráticas.

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Rolando Ames, Pontificia Universidad Católica del Perú
Julio Cotler, Instituto de Estudios Peruanos
Henry Pease, Pontificia Universidad Católica del Perú
Francisco Miró Quesada Rada, Universidad Nacional Mayor de San Marcos
Guillermo O'Donnell, Universidad de Notre Dame
Martín Tanaka, Pontificia Universidad Católica del Perú
Carlos Alza, Pontificia Universidad Católica del Perú
Rosa Alayza, Pontificia Universidad Católica del Perú
Mariana Alvarado, Pontificia Universidad Católica del Perú
Jorge Aragón, Pontificia Universidad Católica del Perú
Omar Awapara, Pontificia Universidad Católica del Perú
Rodrigo Barrenechea, Instituto de Estudios Peruanos
Fabiola Bazo,
Jo-Marie Burt, George Mason University
Maxwell Cameron, University of British Columbia
Julio F. Carrión, University of Delaware
Catherine Conaghan, Queen’s University
John Crabtree, Oxford University
Jennifer Cyr, Northwestern University
Eduardo Dargent, Pontificia Universidad Católica del Perú
Henry Dietz, University of Texas at Austin
Joanna Drzewieniecki,
Graciela Ducantenzeiler, Université de Montréal
Romeo Grompone, Instituto de Estudios Peruanos
Carmen Ilizarbe, Universidad Antonio Ruiz de Montoya
Carlos Indacochea, The George Washington University
Farid Kahatt, Pontificia Universidad Católica del Perú
Charles Kenney, University of Oklahoma
Denise Ledgard, Pontificia Universidad Católica del Perú
Steven Levitsky, Harvard University
Juan Pablo Luna, Pontificia Universidad Católica de Chile
Cynthia McClintock, The George Washington University
Andrés Mejía Acosta, University of Sussex
Carlos Meléndez, University of Notre Dame
Cynthia Milton, Université de Montréal
Paula Muñoz, University of Texas at Austin
Philip Oxhorn, Mc Gill University
Simón Pachano, FLACSO (Quito)
Luis Pásara, Universidad de Salamanca
Kenneth Roberts, Cornell University
María Ana Rodríguez, Pontificia Universidad Católica del Perú
Eduardo Romero, Nonprofit Roundtable of Greater Washington
Mariela Szwarcberg, University of Chicago
Carlos Torres Vitolas, London School of Economics
Jorge Valladares, University of Essex
Sofia Vera, Instituto de Estudios Peruanos
Alberto Vergara, Université de Montréal
Coletta Youngers, Washington Office on Latin America

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Pronunciamiento de historiadores frente al retorno del fujimorismo

A la opinión pública:

En los próximos días, nuestro país enfrentará un momento crucial. Como ciudadanos, tendremos que elegir a un nuevo gobernante entre dos opciones. Una de ellas es la Sra. Keiko Fujimori, cuyo entorno es el mismo que dirigió al país en la década de 1990 bajo la jefatura de su padre, Alberto Fujimori, actualmente en prisión por delitos de corrupción y crímenes de lesa humanidad.

Frente a esta circunstancia, los historiadores e historiadoras abajo firmantes expresamos nuestro más enérgico rechazo hacia el proyecto político que ella y su organización representan. El fujimorismo fue el responsable de la destrucción de la institucionalidad democrática y la formación de la mayor red de corrupción de nuestra historia, de cuyos efectos el país ha buscado recuperarse en la última década.

Por ello, en tanto estudiosos de nuestro pasado y promotores de la vigencia de la memoria histórica de nuestra nación, instamos a la ciudadanía a no olvidar el legado antidemocrático y corrupto del fujimorismo. Recordar la historia a veces nos puede resultar desagradable, pero es la única manera de ser conscientes de que hay errores que no podemos repetir para poder construir un presente digno y un futuro con esperanza.

Por medio de este documento queremos dejar constancia de nuestro compromiso, sea cual fuere el resultado de las elecciones, de defender el Estado de derecho, los valores democráticos y el pleno respeto a los derechos humanos. De igual manera, nos mantendremos vigilantes para garantizar la independencia de la investigación histórica, única forma de evitar la manipulación del discurso histórico con fines políticos.

Lima, 26 de mayo de 2011



Carlos Aguirre, University of Oregon, Eugene, DNI 09068961
Cristóbal Aljovín de Losada, Pontificia Universidad Católica del Perú
Fernando Armas Asín, DNI15355225
Jesús Cosamalón, Pontificia Universidad Católica del Perú, DNI 08023897
Marcos Cueto, DNI 10265401
Nicanor Domínguez, Boise State University, Idaho, DNI 08761340
Paulo Drinot, University of London, DNI 06522303
Alan Durston, York University
Jefrey Gamarra, Universidad Nacional San Cristóbal de Huamanga
Paul Gootenberg, Stony Brook University, New York
Greg Grandin, New York University
Karen Graubart, University of Notre Dame
Jaymie Patricia Heilman, Universidad de Alberta – Canadá
Iván Hinojosa, Pontificia Universidad Católica del Perú
Peter Klarén, George Washington University
Pablo F. Luna, Université Paris Sorbonne, DNI 06519231
María Emma Mannarelli, Universidad Nacional Mayor de San Marcos
Nelson Manrique Gálvez, Pontificia Universidad Católica del Perú, DNI 07779676
Sara Mateos FM CE000306897
Cecilia Méndez, University of California, Santa Barbara, DNI 087-99664
Rachel Sarah O’Toole, University of California, Irvine
Alfonso Quiroz, Baruch College and Graduate Center, City University of New York
Francisco Quiroz, Universidad Nacional Mayor de San Marcos, DNI 25505843
Gerardo Rénique, City College of the City University of New York, DNI 06350465
José Luis Rénique, Lehmann College, City University of New York, DNI 06379628
Natalia Sobrevilla Perea, University of Kent, DNI 09339931
Imelda Vega Centeno, 07182076
Teresa Vergara Ormeño Pontificia Universidad Católica del Perú/Universidad Nacional Mayor de San Marcos, DNI 07936025
Charles Walker, University of California, Davis 213213059
Pablo Whipple Morán, Pontificia Universidad Católica de Chile
Antonio Zapata, Pontificia Universidad Católica del Perú
Carlos Aburto, Instituto Superior de Estudios Teológicos Juan XXIII, DNI 07756818
Gabriela Adrianzén, Pontificia Universidad Católica del Perú, DNI 42679412
Roisida Aguilar, Pontificia Universidad Católica del Perú, DNI 23935505
Patricio Alvarado Luna, Pontificia Universidad Católica del Perú, DNI 71236875
Yoni Amanqui Tacar, Universidad Nacional San Agustín de Arequipa, DNI 42679412
Víctor Arrambide, Universidad Nacional Mayor de San Marcos, DNI 40397390
Maribel Arrelucea, Universidad Nacional Mayor de San Marcos, DNI 09717169
Alfredo Ávila, Universidad Nacional Autónoma de México
Jorge Bedregal La Vera, Universidad Nacional San Agustín de Arequipa, DNI 29539030
Jelke Boesten, University of Leeds
Ernesto Bohoslavsky, Universidad Nacional de General Sarmiento, Argentina, DNI 24136006
Jorge Bracamonte, DNI 06408853
Andrea Valentina Calderón, Universidad Nacional de San Agustín de Arequipa, DNI 45575863
Juan Carlos Callirgos, Pontificia Universidad Católica del Perú, DNI 08769170
Alonso Campos, Pontificia Universidad Católica del Perú, DNI 45457339
Jorge Cárdenas Arana, Universidad San Martín de Porres, DNI 70275722
Gerardo Castillo, Pontificia Universidad Católica del Perú, DIN 07976242
Miguel Costa Vigo, Pontificia Universidad Católica del Perú, DNI 09877239
Yeidd Alonso Chávez Huapaya, Universidad Nacional Mayor de San Marcos, DNI 1076280
Bartholomew Dean, University of Kansas
Julia Famularo, Georgetown University
Carla Di Franco, DNI 40003505
Román Flores, Universidad Pablo de Olavide (Sevilla), DNI 10587205
Juan Fonseca, Universidad Bíblica Latinoamericana, DNI 09759298
Milton Godoy Orellana, Universidad Academia de Humanismo Cristiano – Chile
Ricardo Guerrero, Pontificia Universidad Católica del Perú, DNI 40840241
Francisco Hernández Astete, Pontificia Universidad Católica del Perú, DNI 07865911
Edwin Huancahuari Carrasco, Universidad Nacional Mayor de San Marcos, DNI 41942154
José Luis Igue, University of California, Santa Barbara, DNI 41541782
Juan Carlos La Serna, Universidad de Lima, DNI 40814681
Beatriz Margarita Leal, Pontificia Universidad Católica de Chile
Adrián Lerner, Instituto de Estudios Peruanos, DNI 43810632
David Ricardo Antonio Leyva Jiménez, DNI 10799315
Álex Loayza, El Colegio de México, DNI 09872234
Lawrence W. McMahon, Georgetown University
Victor Maqque, Universidad de Notre Dame, EEUU. DNI 01332195
Francisco Medina Chávez, DNI 18011423
Javier Medina Landeo, DNI 2155780
Michael Mendieta, Escuela Nacional Superior Autónoma de Bellas Artes, DNI 06802188
Cynthia Milton, Université de Montréal
Jorge Moreno Matos, Universidad Nacional Mayor de San Marcos, DNI 06633042
Martín Muñoz, DNI 45293586
Valeria Neves, Pontificia Universidad Católica del Perú, DNI 40960324
Nicolás Ocaranza, École des Hautes Études en Sciences Sociales – París
Pablo Ortemberg, Argentina, Documento de Identidad 2412708
Shirley K. Pazos Bashualdo, DNI 42279172
Juan Paulo Palacios, Universidad Nacional Mayor de San Marcos, DNI 43373808
Liliana Peñaherrera Sanchez, DNI 06645507
Alex Pimentel, DNI 42229326
Javier Puente Valdivia, Georgetown University, DNI 41517435
Rosa Pulido, Pontificia Universidad Católica de Chile
José Ragas, University of California, Davis DNI 10587115
Monica Ricketts, Temple University
Milagros Rodríguez, Universidad Nacional Mayor de San Marcos, DNI 422758887
Roxana Rodríguez-Cadilla, DNI 09673363
Juan Pablo Ronco Castillo, Pontificia Universidad Católica del Perú, DNI 42814481
William San Martín, University of California, Davis
Álvaro Sialer, Pontificia Universidad Católica del Perú, DNI 40036965
Matteo Stiglich, University of California, Berkeley, 41276815
Juan José Torre, DNI 10734811
Nicola Torriti Zolezzi, DNI 40960583
Jorge Valdez Morgan, Pontificia Universidad Católica del Perú DNI 40087220
David Velásquez Silva, Universidad Nacional Mayor de San Marcos, DNI 40852804
Roel Alonzo Torres, Pontificia Universidad Católica del Perú, DNI 10723476
Francisco Medina Chávez, DNI 18011423
Javier Medina Landeo, DNI 21557800
Juan Paulo Palacios, Universidad Nacional Mayor de San Marcos, DNI 43373808
Shirley K. Pazos Bashualdo, DNI 42279172
David Ricardo Antonio Leyva Jiménez, DNI 10799315
Marylin Vásquez Gonzales, Escuela de Periodismo Jaime Bausate y Mesa, DNI 45941764
Héctor Velásquez, DNI 06994867

Agradecemos también a aquellos colegas que por razones personales y profesionales no pueden adherirse públicamente al presente pronunciamiento pero que nos han hecho llegar su apoyo y solidaridad

Arte que no olvida


En las últimas semanas, diversas iniciativas artísticas han tomado las calles. Con escasa cobertura, estos colectivos indignados realizan acciones ante un posible retorno del fujimorismo que robó, asesinó y dejó hecho trizas al país hace tan solo una década.

A través de intervenciones, gráficas y acciones subrepticias, estos grupos han generado varios actos de impacto considerable. Hace una semana, Eduardo Adrianzén convocó 'Lava tu sábana contra el Plan Sábana’, una protesta creativa (el lavado público de sábanas en la plaza San Martín) contra la campaña de desinformación mediática. Un gesto que evoca el emblemático 'Lava la bandera’ del colectivo Sociedad Civil, que movilizó a miles de personas en una limpieza ritual al final de la dictadura fujimorista.

El sábado, un grupo de ciudadanos organizó un gran 'lavado de banderas’ en la plaza Jacinto Benavente, en Madrid, y lo mismo ocurrió en Barcelona. Lo que señala cómo cierto arte disuelto en lo social es capaz de convertirse en herramienta viva de desacuerdo y defensa de la dignidad.

El arte convierte la protesta ortodoxa en un espacio de afirmación de vida, renovando los lazos sociales y la fe perdida. Como la movilización y la poesía del colectivo 'Mujeres Dignidad’ o de quienes hace poco decidieron usar sus cuerpos para esparcir por las aceras de Lima la frase “No a Keiko”: porque un futuro mejor no puede ser JAMÁS volver a lo peor del pasado.

Miguel A. López

(publicado en Perú21 el miércoles 25 de mayo)